
IN HEAVEN
Nunca podré olvidar esos días. El segundo piso de esa acogedora casa de Monseñor Sótero Sanz, albergaba sueños, ilusiones y la esperanza de un mejor mundo publicitario. Bueno, eso al menos fue lo que nos hicieron creer a los 32 patanes que trabajábamos ahí.
Debo reconocer que por esos días andaba perdido en la vida. Con el pelo largo y chascón, unos kilos demás por culpa de los asados, la barba al estilo Ossama y con extravío crónico del sentido común. Factores varios que hicieron de mí, un wn dedicado a una función que nunca pude disfrutar. Aunque bueno, no todo era tan malo. Tenía uno de los mejores computadores de la agencia en el cual fácilmente podía hacer muchas cosas terriblemente de entretes a la vez:
Ver Dvd´s, chatear en messenger, sapear en youtube, asar choripanes, pasear por valpo, coleccionar seamonkeys, ver blogs buenos y, de vez en cuando, hacer algo distinto a bolsas de liquidación o logos para Falabella (cuenta en la que laburé por esos meses).
Pero uno de esos días, más bien un martes, mientras hacia cualquiera de esas cosas anteriormente nombradas, pasó algo que me dejó con la mandíbula caída. Todo, porque esa tarde veíamos el Dvd del reencuentro de Pixies en mi compu. Este show había sido transmitido por la NBC el sábado anterior y llegó a mis manos gracias al gran Torrent. Era un show en formato digital y con sonido a toda raja. Ahí estábamos Rodo, Flanche y yo alucinados con lo que estábamos viendo.
Mientras el disco versátil daba sus vueltas en el lector vertical, entró el mismísimo Carlos Baccetti por la puerta de nuestra oficina (realizaba visitas esporádicas a El Cielo - A&B) y al ver que estábamos todos muy pendientes de mi pantalla, se acercó de forma amistosa pero ampliamente desconocida.
Ahí, sucedió algo que va a quedar marcado para siempre en mi vida. Y digo para siempre, porque el tipo que yo creía con más cultura pop del orbe, se lanza un poco certero y más bien desafortunado comentario:
¿Quéeeee?... ¿Baccetti no conocía a Pixies?… ¿Una de las bandas más influyentes del rock mundial era desconocida para un referente de la publicidad universal? Chuta… Pero así no más era la webada.
De ahí, nunca más lo vi como ídolo. Hasta mi abuela sabía quienes eran los Pixies. Además, el hecho sirvió para darme cuenta que no todo lo que brilla en la tierra son las zapatillas adidas doradas de Carlos Baccetti.
Debo reconocer que por esos días andaba perdido en la vida. Con el pelo largo y chascón, unos kilos demás por culpa de los asados, la barba al estilo Ossama y con extravío crónico del sentido común. Factores varios que hicieron de mí, un wn dedicado a una función que nunca pude disfrutar. Aunque bueno, no todo era tan malo. Tenía uno de los mejores computadores de la agencia en el cual fácilmente podía hacer muchas cosas terriblemente de entretes a la vez:
Ver Dvd´s, chatear en messenger, sapear en youtube, asar choripanes, pasear por valpo, coleccionar seamonkeys, ver blogs buenos y, de vez en cuando, hacer algo distinto a bolsas de liquidación o logos para Falabella (cuenta en la que laburé por esos meses).
Pero uno de esos días, más bien un martes, mientras hacia cualquiera de esas cosas anteriormente nombradas, pasó algo que me dejó con la mandíbula caída. Todo, porque esa tarde veíamos el Dvd del reencuentro de Pixies en mi compu. Este show había sido transmitido por la NBC el sábado anterior y llegó a mis manos gracias al gran Torrent. Era un show en formato digital y con sonido a toda raja. Ahí estábamos Rodo, Flanche y yo alucinados con lo que estábamos viendo.
Mientras el disco versátil daba sus vueltas en el lector vertical, entró el mismísimo Carlos Baccetti por la puerta de nuestra oficina (realizaba visitas esporádicas a El Cielo - A&B) y al ver que estábamos todos muy pendientes de mi pantalla, se acercó de forma amistosa pero ampliamente desconocida.
Ahí, sucedió algo que va a quedar marcado para siempre en mi vida. Y digo para siempre, porque el tipo que yo creía con más cultura pop del orbe, se lanza un poco certero y más bien desafortunado comentario:
CB - Ché ¿y éstos quienes son?
MM - :o … PIXIES, que se volvieron a juntar después de mucho tiempo...
CB - Ah... No los conocía... les falta onda a esos pibes, eh...
MM - (mandíbula abajo).
MM - :o … PIXIES, que se volvieron a juntar después de mucho tiempo...
CB - Ah... No los conocía... les falta onda a esos pibes, eh...
MM - (mandíbula abajo).
¿Quéeeee?... ¿Baccetti no conocía a Pixies?… ¿Una de las bandas más influyentes del rock mundial era desconocida para un referente de la publicidad universal? Chuta… Pero así no más era la webada.
De ahí, nunca más lo vi como ídolo. Hasta mi abuela sabía quienes eran los Pixies. Además, el hecho sirvió para darme cuenta que no todo lo que brilla en la tierra son las zapatillas adidas doradas de Carlos Baccetti.
¡¡Gerooooopaaaaaaa!!…
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4 comentarios:
OH MY GOLLY!!!!
Para que veas Medinamo que "el que sabe sabe y el que no es JEFE" serían mis escuetas palabras ante semajante barbarie.
más encima el argento bribón remata con un "le falta onda a esos pibes"?!
OH MY GOLLY!! OH MY GOLLY!!
saludos cordiales.
Cami.
a mi me paso lo mismo mismo, pero io no trabajaba en el cielo, sino en el INFIERNO i mi redactor mas mas favorito de toos los mundos, iegó a mi despaxo justo cuando io escuxaba al Dios de Daddy Yankee i dice: q basura es esa che¿? (tb era argentino ia)
ese dia iore como nunka i cuando lo recuerdo aun me duele el corazoncito =(
hasta cuando aparezco en estas historias sin saberlo?
paga los derechos.
bu... pero bue.. uno nunca sabe..
quizás sea idolo en otras cosas....
aunque yo ni sabia quienes eran los pixies...
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